Sevilla 29 de Octubre 2007... JUEGO SIN JAULA

lunes, 29 de octubre de 2007

Hoy en clase, hemos empezado con el espacio, contestando a tres preguntas; ¿Qué es el espacio?, las zonas en las escuelas, y el espacio en las organizaciones. Del análisis de estas tres preguntas junto con la aportaciones de algunos compañeros, han ido surgiendo una lluvia de ideas donde finalmente hemos tenido que elaborar nuestra definición de espacio y sacar conclusiones.

La segunda parte en la que se ha ecturado la clase ha sido en la dinámica: “Juego sin jaula”. Esta dinámica se encuentra recogida en el blog de la asignatura.

Tras haber leído detenidamente el texto, a priori me sugieren diferentes ideas, ideas tales como, la estructura escolar, el conservadurismo en la escuela, la concepción del sistema educativo… todas ellas regidas y apoyadas en un espacio y en un tiempo concreto.

Este texto nos comenta como en las escuelas existen un riguroso planteamiento el cual procede de antaño con la industrialización y con el mecanicismo como hemos podido ver con los principios de Taylor y comprobar en la película: “Tiempos modernos”.

Realmente mi crítica no va encaminada hacia la escuela, sino hacia la sociedad. La cual influye en el sistema educativo y en los alumnos. Está claro que dependiendo del ideal político que en ese momento se encuentre en el poder, influirá en mayor o menor medida en algunos aspectos escolares, tanto a nivel curricular como a nivel organizativo, también es cierto que esa influencia se ve “justificada” por la subjetividad de un grupo de personas que piensan que es lo mejor para TODOS los alumnos de los centros educativos españoles (grupo de personas que tienen los mismos intereses). Seguidamente una vez se aplica esta descontextualización del curriculum, se pasa a preparar al alumno, desde pequeños, a entrenarlos para la sociedad actual y ser parte integrante de la misma, sin opción a poder trasformar esa realidad. Según Paulo Freire, en “Pedagogía del oprimido” nos habla de una “concepción bancaria” de la educación, en donde el único margen de acción que se les permite a los alumnos es el de recibir los “depósitos” que el maestro haga. En el mismo texto hace mención que la finalidad de los profesores en la mayoría de los casos es la de lograr una mejora de la adaptación a la situación, mediante una cultura de pasividad inculcada al alumno desde hace años. Como resultado no se educa libremente ejerciendo una profesión de guía y conductividad al alumno, sino la función principal es exponer los contenidos (que “desde arriba” nos llegan) de una forma narrativa y continua y que los alumnos aprendan como mejor puedan.

Y por último, aterrizando en los centro y haciendo referencia a la “jaula” en la que se menciona el recreo en el cual los alumnos se sienten parte activa y dominantes de ese espacio y tiempo, decir que no creo que esas sensaciones y sentimientos deben formar parte del alumno o del colegio, para ello es necesario ampliar y abrir nuestro campo de visión y tener en cuenta que el aprendizaje debe darse desde una perspectiva amena y, ¿Por qué no? Lúdica también, ya que el profesor tiene como deber que los alumnos aprendan y para ello debe adaptarse a las necesidades de ellos y a la metodología más adecuada. De esta forma conseguiremos que el recreo sea un espacio para la creatividad, la socialización, habilidades… al igual que el aprendizaje lo sea también.

Aquí os dejo un enlace para que podáis conocer mejor a Paulo Freire: http://es.wikipedia.org/wiki/Paulo_Freire

Sevilla 26 de Octubre 2007... ELTON MAYO

viernes, 26 de octubre de 2007

La teoría de las relaciones humanas (también denominada escuela humanística de la administración), desarrollada por Elton Mayo y sus colaboradores, surgió en los Estados Unidos como consecuencia inmediata de los resultados obtenidos en las experiencias de Hawthorne, fue básicamente un movimiento de reacción y de oposición a la teoría clásica de la administración.

La teoría clásica pretendió desarrollar una nueva filosofía empresarial, una civilización industrial en que la tecnología y el método de trabajo constituyen las más importantes preocupaciones del administrador. A pesar de la hegemonía de la teoría clásica y del hecho de no haber sido cuestionada por ninguna otra teoría administrativa importante, sus principios no siempre se aceptaron de manera sosegada, específicamente entre los trabajadores y los sindicatos estadounidenses. En un país eminentemente democrático como los Estados Unidos, los trabajadores y los sindicatos vieron e interpretaron la administración científica como un medio sofisticado de explotación de los empleados a favor de los intereses patronales. En consecuencia, “la teoría de las relaciones humanas surgió de la necesidad de contrarrestar la fuerte tendencia a la deshumanización del trabajo, iniciada con la aplicación de métodos rigurosos, científicos y precisos, a los cuales los trabajadores debían someterse forzosamente”.

El Experimento de Hawthorne

A partir de 1924 la Academia Nacional de Ciencias de los Estados Unidos inició algunos estudios para verificar la correlación entre productividad e iluminación en el área de trabajo, dentro de los presupuestos clásicos de Taylor.
El Consejo Nacional de Investigación inició un experimento en una fábrica, situada en Chicago, en el barrio de Hawthorne, con la finalidad de determinar la relación entre la intensidad de la iluminación y le eficiencia de los obreros en la producción. Ese experimento, que se volvería famoso, fue coordinado por Elton Mayo; luego se aplicó también al estudio de la fatiga, de los accidentes en el trabajo, de la rotación de personal y del efecto de las condiciones físicas del trabajo sobre la productividad de los empleados.


Primera fase del experimento de Hawthorne: Se comprobó la primacía del factor psicológico sobre el fisiológico: la relación entre condiciones físicas y la eficiencia de los obreros puede ser afectada por condiciones psicológicas.

Segunda fase del experimento de Hawthorne: La investigación llevada a cabo con el grupo experimental se dividió en doce periodos para observar cuales eran las condiciones de rendimiento más satisfactorias. Entre los cuales destacamos conductas como producción individual, salario en función de ese trabajo, descansos…tras los doce períodos la producción aumentó.

Tercera fase del experimento de Hawthorne: Buscar mejores condiciones físicas de trabajo y se dedicaron a estudiar las relaciones humanas en el trabajo. Inició el programa de entrevistas para escuchar las opiniones de los trabajadores, aunque tres años más tarde aparecieron las entrevistas no dirigidas. El programa de entrevistas reveló la existencia de una organización informal de los obreros, conformada para protegerse de cualquier amenaza de la administración contra su bienestar.
Cuarta fase del experimento de Hawthorne: Pretendía analizar la organización informal de los obrero. Se utilizaba un conjunto de artimañas: cuando alcanzaban lo que ellos juzgaban era su producción normal, reducían su ritmo de trabajo, también, solicitaban pago por exceso de producción. Se comprobó que esos trabajadores presentaban cierta uniformidad de sentimientos y solidaridad grupal, lo que se reflejó en los métodos que el grupo desarrolló para legitimar sus acciones: consideraba delator al miembro que perjudicase a algún compañero y presionaba a los más rápidos, a través de penalizaciones simbólicas, para “estabilizar” su producción. Esa cuarta fase permitió el estudio de las relaciones entre la organización informal de los empleados y la organización formal de la fábrica.

Conclusiones del experimento de Hawthorne: Este experimento permitió delinear los principios básicos de la escuela de las relaciones humanas. Entre las conclusiones principales pueden mencionarse a siguientes:

El experimento de Hawthorne permitió comprobar que el comportamiento del individuo se apoya por completo en el grupo.

En general, los trabajadores no actúan ni reaccionan aisladamente como individuos, si no como miembros de grupos.

La teoría del control social sobre el comportamiento. La amistad y los grupos sociales de los trabajadores poseen significado trascendental para la organización y, por lo tanto, deben ser considerados los aspectos importantes.


George Elton Mayo (1880-1949) .Era un filósofo, enseñó en la Universidad de Queensland, acerca de temas sociales como de contenido del trabajo. Se trasladó a la Universidad de Pennsylvania. Entre 1926 y 1947 fue profesor de investigación industrial en la Harvard Business School. Es sobre todo conocido por su investigación que incluye los estudios de Hawthorne o "Hawthorne Studies" de 'la lógica del sentimiento' de los trabajadores y la 'lógica del coste y la eficiencia' de los directivos que podría conducir a conflictos dentro de las organizaciones.

Sevilla, 25 de Octubre...ALGUNOS RASTROS DE CONSERVADURISMO EN LA INSTITUCIÓN ESCOLAR. EL OLVIDO DE LOS VALORES LAICOS. Jurjo Torres Santomé

jueves, 25 de octubre de 2007

De todas las frases, la más me ha llamado la atención y por la que mas curiosidad tenía era la número 10: Rituales, hábitos religiosos. (Torres, X, 1996, "Algunos rasgos del conservadurismo en la escuela").

Un análisis de los diferentes modos de funcionamiento, los métodos de trabajo, la jerarquía organizativa, los recursos y valores en las empresas capitalistas, las instituciones religiosas y la escuela confesional, puede hacernos comprender el sentido de muchas rutinas y formas de trabajo que abundan en la institución escolar y en la vida del aula. Las empresas marcaron pautas a la escuela, sobre todo en el modo de funcionamiento del trabajo y en su organización. Las instituciones eclesiásticas valores y modos de vida, así como los modos de autoridad, recursos, metodología....

En principio haremos referencia a la comparación con las empresas y fábricas. Son los lugares de trabajo en las empresas capitalistas los que imponen su modo de actuación a las instituciones escolares. La jerarquía que caracteriza a las empresas de producción y distribución, los valores, normas, habilidades que acompañan a un modo de trabajo típico de una concepción capitalista y de la burocracia que las organiza, son el espejo en que se mira la institución escolar para determinar su funcionamiento y rutinas de trabajo.

Sin embargo, a la hora de analizar la vida en las aulas es necesario tomar también en consideración otra esfera social con una influencia decisiva: la religión, en sus formas de institución. Podemos decir que todavía en la actualidad su peso se deja notar de manera importante. Algo obvio, ya que no podemos olvidar que durante mucho tiempo las tareas educativas estuvieron en manos de las Iglesias, en gran medida. De ahí, que las escuelas llegasen a copiar los modelos que las instituciones eclesiásticas venían utilizando con un notable grado de éxito para reproducir sus concepciones y estilos de vida. La escuela se miró también en el espejo de la Iglesia, en sus discursos y prácticas de legitimación de poder, y no sólo en el de las empresas destinadas a la producción de bienes materiales y a su distribución.

Los modelos organizativos que venía utilizando la Institución Eclesiás­tica en las Iglesias para reforzar la fe de las personas creyentes van a servir también para facilitar las tareas peda­gógicas de los centros de enseñanza. Las Iglesias y las escuelas mantuvie­ron durante mucho tiempo una fuerte similitud, se parecían en muchas for­mas, recursos, ritos y modalidades de interacción.

Ambas van a ser instituciones jerarquizadas, basadas en criterios de autoridad. Las Iglesias se servirán para ello de la palabra divina que reprodu­cen sus ministros (sacerdotes, obis­pos, etc.), mientras que en las institu­ciones escolares serán las profesoras y profesores las únicas fuentes autori­zadas para legitimar el conocimiento válido. La estructura de autoridad que rige en el interior de ambas instituciones tiene también visi­bilidad, a través de una posición privi­legiada en el espacio, de tal manera que es únicamente desde ese espacio físico (altar o mesa del profesor o profesora) desde donde se puede contemplar a todas las personas que allí acuden. La iconografía existente también refuerza esta visibilidad de la autoridad; en la Iglesia serán las imá­genes representativas de la divinidad y en la institución escolar las fotografías del Rey y/o de algún miembro de la Sagrada Familia las que refuercen las figuras de la autoridad allí delegada (el profesorado).

Las dos instituciones van a coinci­dir en la peculiaridad de los recursos que emplean para evangelizar y edu­car, respectivamente. La Iglesia predi­cará apoyándose en la Biblia y en el catecismo, en cuanto instrumentos que recogen el conocimiento consi­derado verdadero e inmutable por quienes tienen el gobierno de esta institución. Los libros de texto suponen para el alum­nado el texto “sagrado”, el texto donde se contiene el conocimiento válido, los contenidos culturales que hay que limitarse a reproducir. El énfasis se pone más en la reproduc­ción que en la reconstrucción del conocimiento y en la investigación.

No olvidemos que casi hasta fina­les de la década de los sesenta el parecido entre los catecismos y libros de textos era mucho mayor, ya que estos incluso copiaban la forma en la que comunicaban la información, o sea, a base de pequeñas preguntas y pequeñas respuestas. Incluso la pala­bra libro de texto hace referencia a un criterio de autoridad de matiz reli­gioso; se trata de un término con el que se tradicionalmente se hacía refe­rencia a la Biblia, o sea, los textos sagrados.

La metodología empleada por ambas instituciones también muestra coincidencias importantes. Tanto la Iglesia como las Instituciones escola­res generaron un discurso obsesiona­do por el trabajo en cuanto sacrificio. El trabajo es el castigo al que Dios somete a la humanidad como resultado del pecado de Adán y Eva. La Igle­sia demoniza el cuerpo y el deleite y prefiere valorar el dolor y la pobreza como elemento de purificación y vía para obtener la Salvación. Es esta ins­titución la que coadyuva más decisiva­mente a propagar la concepción de trabajo alienado como la única forma de trabajo; el trabajo concebido como castigo, como carga. Se olvida, por tanto, que el verdadero trabajo humano tiene que ser creativo, servir para realizar a la persona, implicar su participación activa, debe contribuir a incrementar sus destrezas y conoci­mientos y, lo que es decisivo, el traba­jo necesita ser relevante, significativo para la persona; por tanto, el incenti­vo del trabajo debe radicar en su rea­lización.

La educación en los centros de enseñanza fue también incorporando esta concepción de trabajo alienado de ahí que estudiar sea visto por numerosas chicas y chicos como un sufrimiento obligatorio. En algunos colegios, estudiar es repetir cosas sin sentido, aburridas, es algo muy difícil, un castigo que hay que sobrellevar para poder obtener “aprobados” (recompensas extrínsecas) y tener posibilidades de acceder a un puesto de trabajo el día de mañana y ganar un buen salario.

El silencio y el trabajo individual es otra nota distintiva en ambas insti­tuciones. La capacidad de hablar, deci­dir, juzgar, y valorar sólo le está per­mitida a las figuras de autoridad. La interacción entre iguales es algo fuera de lugar ya que los éxitos y fracasos en la vida y en la institución escolar son únicamente responsabilidad de cada persona, de cada estudiante. De ahí que nunca podamos culpar de nada a ninguna estructura o forma de organización del trabajo y de la socie­dad (Torres, J., 1991, cap. lll).

El sacarlas a colación en este trabajo es para utilizarlas como ejemplo del con­tacto y permeabilidad de la escuela con otras instituciones pertenecientes a aquellas esferas de la sociedad que en cada momento histórico concreto gozan de mayor prestigio y acepta­ción. La institución escolar no es un espacio incomunicado sino que, al contrario, para entender lo que aquí sucede es preciso tomar en consideración el resto de esferas de la socie­dad (la económica, política, cultural, religiosa y militar) (Torres, J., 1991). En caso contrario, difícilmente pode­mos llegar a vislumbrar el verdadero sentido y significado de las rutinas, rit­mos, recursos didácticos, tareas esco­lares y modelos organizativos peculia­res de muchos centros de enseñanza.

Investigar su origen ayuda a repensar su valor. La Iglesia es una institución dedicada a transmitir; por el contrario, la escuela a recons­truir, a someter a análisis crítico la realidad y a capacitar para intervenir en ella y poder transformarla. Lógica­mente, al tener finalidades distintas las estrategias utilizadas en una no sirven para la otra; y si se emplean es proba­ble que den como resultado el fin para el que fueron propuestas; en caso de ser las de la Iglesia: adoctrinar y reproducir las verdades reveladas.

Los centros de enseñanza y la Iglesia en muchos momentos de la historia trabajaron en una misma dirección; desde el siglo pasado, al servicio del capital y también de la propia institución eclesiástica. En la actualidad las contradicciones entre la Iglesia, el Estado y el Capital son mayores; la escolarización en sus centros edu­cativos.

Tras leer el texto nos damos cuenta como a lo largo de la historia, el sistema educativo ha ido evolucionando, desde la imitación de otras instituciones a adquirir poco a poco actuaciones propias. En el articulo nos damos cuenta como todos las actuaciones, metodologías, fines… de la educación vienen repaldadas por teorías, creencias y costumbres de la época, bien desde la perpectiva laboral, en cuanto a la forma de trabajar en cadena como se puede contemplar en la película que vimos “tiempos modernos”, bien en la institución de la Iglesia que recuerda actuaciones y ritos hoy en dia en los centros escolares. Estas “tradiciones copiadas” en su mayoría están planteadas para un fin, en este caso, la Iglesia plantea una actuaciones de acuerdo con la finalidad que, como bien dice el texto, es para trasmitir, pero que aplicada a la educación no ejerce un buen planteamiento, ya que aunque en la educación se trasmiten conocimientos, normas, valores… es necesario que exista un planteamiento más específico para poder conseguir el fin final de la educación, que bajo mi punto de vista es el formar bajo aprendizajes constructivistas.

Fuente: http://www.quadernsdigitals.net/index.php?accionMenu=hemeroteca.VisualizaArticuloIU.visualiza&articulo_id=1065

Sevilla, 23 de Octubre...EL POSITIVISMO

martes, 23 de octubre de 2007

Consiste en no admitir como validos científicamente otros conocimientos, sino los que proceden de la experiencia, rechazando, por tanto, toda noción a priori y todo concepto universal y absoluto. El hecho es la única realidad científica, y la experiencia y la inducción los métodos exclusivos de la ciencia. El positivismo no tiene en cuenta la inteligencia humana..

  • Evolución.

El térmirmino positivismo fue utilizado por primera vez por el filósofo y matemático francés del siglo XIX Auguste Comte, pero algunos de los conceptos positivistas se remontan al filósofo británico David Hume, al filósofo francés Saint-Simon, y al filósofo alemán Immanuel Kant.

Comte eligió la palabra positivismo sobre la base de que señalaba la realidad y tendencia constructiva que él reclamó para el aspecto teórico de la doctrina. En general, se interesó por la reorganización de la vida social para el bien de la humanidad a través del conocimiento científico y por esta vía, del control de las fuerzas naturales. Los dos componentes principales del positivismo, la filosofía y el gobierno (o programa de conducta individual y social), fueron más tarde unificados por Comte en un todo bajo la concepción de una religión, en la cual la humanidad era el objeto de culto.

Sevilla, 23 de Octubre...WEBER Y LA BUROCRACIA

Hoy en clase hemos estado en grupo debatiendo y comentando características y peculiaridades de las investigaciones y propuestas llevadas a cabo por el sociólogo alemán Max Weber. Antes de analizar y comentar la idea que más me ha llamado la atención, quisiera hacer una reflexión sobre el comienzo de la sociología y la repercusión en las organizaciones.

A comienzos del siglo XIX, surge un movimiento representado por pensadores como: Max Weber, Dilthey, Droysen, Rickert y Collingwood. Todos ellos rechazaron la postura positivista de la ciencia por tratarse de un monismo metodológico y a la vez crearon líneas directrices propias de las ciencias sociales, tales como: la identificación de un objeto de estas ciencias el cual consiste en la comprensión del fenómeno y no en la explicación del mismo a diferencia del positivismo.

En las ciencias sociales se propuso el método de la comprensión, es decir el método hermenéutico, el cual busca entender o interpretar el sentido y el significado de los actos humanos. Comprender significa develar el sentido de las cosas. Kant afirma que “El conocimiento es una combinación de cuánto aporta la realidad con las formas de nuestra sensibilidad y las categorías de nuestro entendimiento. No podemos captar las cosas en sí mismas son solo tal como las descubrimos por medio de nuestros sentidos y de la inteligencia que ordena los datos brindados por ellos. O sea, que no conocemos la realidad pura sino solo como es la realidad para nosotros.” Es decir que siempre habrá una hermenéutica de la realidad, ya que el sujeto que la percibe hace una interpretación de la misma, por eso los criterios de verdad y de objetividad se revalúan en el nuevo concepto de las ciencias sociales.

Otra de las características de la concepción hermenéutica es “la unidad sujeto -objeto, en oposición a la dicotomía sujeto investigador-objeto investigado, propio del positivismo. La primera relación da origen a la intersubjetividad en oposición a la segunda donde se privilegia la objetividad. Estas dos características y el propósito de comprender hechos y generar principios y no leyes generales es lo que para los epistemólogos justifica la autonomía de las ciencias sociales con respecto a las ciencias naturales (Mardones y Usua, 1988).

El hecho de empezar haciendo referencias a estas ideas anteriormente citadas es debido a que creo que es necesario comprender las relaciones sociales; de donde llegan, su evolución y cuáles son sus finalidad para posteriormente comprender las organizaciones en su totalidad. Ejemplo de ello son los dos autores ya conocidos (Taylor y Max Weber) los cuales nos especifican sus principios y teorías referidas a ciertos aspectos que perduran hoy en día en nuestra sociedad y como consecuencia en las organizaciones.


Hablando ya, específicamente de las ideas que se han expuesto en clase, el tema de la burocracia es el que más me ha llamado la atención y el que me gustaría comentar.

Cerca de mediados del Siglo XX se desarrolló en el ámbito organizacional un movimiento que complementaba los criticados efectos de la Administración Científica-Mecanicista-Reduccionista liderada por Federick Taylor (1.856-1.915) en el continente americano, y por Henry Fayol (1.841-1.925) en la economía europea. Se trata de la corriente burocrática, denominada por muchos el Modelo Burocrático de Max Weber (1.804-1-920) que tuvo gran trascendencia y aceptación por involucrar el concepto, referido a la “meritocracia”.

Las razones por las cuales emerge el Modelo Burocrático de Weber están fundamentadas en la necesidad de darle continuidad a los conceptos “trabajo”, “trabajador” y “empresa” bajo la orientación cientificista, que se vieron debilitados en el marco de la transición del esquema mecanicista-reduccionista hacia la propuesta humanista; ambas propuestas tuvieron alto grado de insatisfacción de expectativas que las organizaciones de entonces necesitaban superar.

Weber definió la burocracia como la forma más eficiente de organización teniendo en cuenta la complejidad de los aparatos estatales, de las dependencias gubernamentales y pensando en las necesidades de sociedades cambiantes y dinámicas.

En primer lugar me gustaría hacer un breve inciso en el concepto de burocracia:

La burocracia resulta un "tipo ideal de organización" delimitada por una estructura de dominación legal que se ejerce por medio de la vía administrativa aplicable a grandes organizaciones tanto del estado como del sector privado. Representa una estructura administrativa y de personal de una organización.

Max Weber identificó normas básicas fundamentales para el desarrollo burocrático, algunas de ellas son:

- Los cargos, el núcleo principal.

- Posición externa e interna neutral del burócrata con respecto al cargo.

- Funcionarios organizados por jerarquía de mando.

- Remuneraciones sobre salarios sin gratificaciones por servicios.

- Los niveles de autoridad están determinados por el trabajo o la función desarrollada.

- Nombramientos por méritos y calidad de trabajo.

- Trabajo sobre procedimientos y normas establecidas.

- Registro en papel de todas las actividades desarrolladas y se basa en documentos y procedimientos por escrito (formularios, comprobantes, certificaciones etc).


Sevilla, 22 de Octubre...Letra de una canción

lunes, 22 de octubre de 2007

Letras de Canciones de Carlos Jean

Artista: Carlos Jean
Album: Mr. Miracle
Canción: Tiempo

...Acabo de despertar y con el tiempo voy aprendiendo
Que la mañana te ayuda a ver las cosas con más claridad
Que lo que antes dolía mucho
Hoy tiene algodones en las esquinas
Y empieza a ser como una caricia
Y duele menos, mucho menos
Que el tiempo juega un papel muy importante
Y nos lo están quitando por todas partes

Tiempo

No se puede construir ná, ná de ná, ná
Tiempo, pa volver a casa tu quieres tiempo
Pa encontrar la calma necesitas tiempo
Pa tomar tus decisiones, tiempo
Pa tocarte los cojones, tiempo
Pa pasarlo con tus hijos, tiempo
Pa fumarte un cigarrito, tiempo
Pa perder el tiempo, tiempo
Pa disfrutar el momento, tiempo
Pa coger un autobús, tiempo
Pa decirle al jefe quiero tiempo
Pa mirar al cielo quiero tiempo
Pa escuchar las canciones tomate tu tiempo
Pa currar yo mido siempre el tiempo
Pa disfrutar quiero que sobre el tiempo
Yo pa coger olitas quiero tiempo

Tiempo
...

Sevilla, 22 de Octubre...CURRICULO FLEXIBLE - JORNADA ESCOLAR.

¿Hay coherencia entre el currículo flexible y la jornada escolar?

Cuando se habla de currículo flexible engloba el tiempo, espacio, materiales, recursos humanos….y realmente no creo que se pueda hablar de currículo flexible cuando alguna de estas variables no son adaptadas a las características de los alumnos de una clase. Pero al igual que hemos expuesto en el blog del grupo, si creo que en un principio las necesidades de los alumnos fueran tenida en cuenta a la hora de distribuir materias, cubrir horas… pero realmente en cada clase hay una serie de alumnos con características todos ellas muy diferentes, y hay que suplir tanto las carencias como los excesos y que puedan completar la formación del modo más normalizador posible alumno. Esta flexibilidad debe darla el currículo en primera instancia pero es la jornada escolar la que debe estar abierta a cambios según se consideren necesarios y no generalizar y englobar a todos los alumnos considerándolos iguales tanto en capacidades como en concentración.